Las dieciséis crónicas que componen este libro desnudan la crueldad a que estan sometidos los niños colombianos. El autor narra historias tan desgarradoras como aquella de las jovencitas de Saravena, asesinadas brutalmente por el solo hecho de ser amigas de policias o soldados; o los35.000 niños obligados a raspar coca; el drama de dos hermanos, uno guerrillero y otro soldado; la tragedia de Susana, la madre a quien robaron su hijito para convertirlo en mendigo, y que ella encontró en la calle , sin manos... Este recorrido por los laberintos de la inocencia profanada y los sueños que nos muestra, con toda crudeza, que si no protegemos a los niños, nuestra sociedad jamás podrá aspirar a un mejor futuro.